jueves, 10 de noviembre de 2011

YO, ROBOT de ISAAC ASIMOV


Una investigación llevada a cabo por un periodista acerca de la trayectoria de la robopsicóloga Susan Calvin da pie a los nueve relatos que componen esta novela. Las tres leyes de la robótica, a las que en obras posteriores Asimov añadiría alguna más, constituyen las normals que rigen el comportamiento en los diferentes conflictos que se presentan entre humanos y robots. Si bien admiten una lectura independiente, la modernidad y éxito de este libro se explica por la audacia en la composición y por la aplastante lógica en las reflexiones que aparecen acerca de la robótica. "Yo ,robot" es uno de los pocos títulos de ciencia ficción que han superado con amplitud el círculo de lectores especialmente aficionados, entre los que a menudo se considera una obra cumbre. Su influencia y la de las tres leyes de la robótica en ella enunciadas es muy notable en las novelas aparecidas posteriormente acerca de robótica.


Extraído de www.casadellibro.com

SEDA de ALESSANDRO BARICCO


Esta no es una novela. Ni siquiera es un cuento. Esta es una historia. Empieza con un hombre que atraviesa el mundo y acaba con un lago que permanece inmóvil, en una jornada de viento. El hombre se llama Hervé Joncour. El lago, no se sabe. Se podría decir que es una historia de amor. Pero si solamente fuera eso, no habría valido la pena contarla. En ella están entremezclados deseos y dolores que se sabe muy bien lo que son pero que no tienen un nombre exacto que los designe. En todo caso, ese nombre no es amor. Esto es algo muy antiguo. Cuando no se tiene un nombre para decir las cosas, entonces se utilizan historias. Así funciona. Desde hace siglos. Todas las historias tienen una música propia. Esta tiene una música blanca. Es importante decirlo porque la música blanca es una música extraña, a veces te desconcierta: se ejecuta suavemente y se baila lentamente. Cuando la ejecutan bien es como oír el silencio y a los que la bailan estupendamente se les mira y parecen inmóviles. La música blanca es algo rematadamente difícil.

Extraído de www.casadellibro.com